Por: Redacción
El procurador de Protección al Ambiente (ProAm), Arturo Guzmán Ábrego, encabezó la clausura del tiradero de basura en el municipio de Charo, ya que presentaba varias irregularidades de impacto ambiental, entre éstas, no contar con la autorización para el tratamiento de residuos de manejo especial.
Lo anterior, fue atestiguado por el presidente municipal de Charo, Raúl Prieto Gómez, quien recibió y firmó el acta en la que quedó constatada la clausura de dicho establecimiento, en el cual también se arrojaban los materiales sin previa separación en un barranco no autorizado, propiciando ser quemados al aire libre con las consecuencias de salud negativas para quienes ahí laboran y las comunidades cercanas, aunado a la ilegalidad del tiradero.
Cabe destacar que desde la administración municipal anterior, las autoridades locales habían sido notificadas sobre las correcciones que tenían que llevar a cabo para el manejo de este depósito de residuos, y al no cumplir con los lineamientos requeridos se procedió a la clausura.
Dentro de los requerimientos que se solicitaron para su regularización están un estudio de daño ambiental y tener en orden la autorización expedida por la Secretaría de Urbanismo y Medio Ambiente del estado (SUMA), para el tratamiento de residuos de manejo especial.
El procurador de Protección al Ambiente (ProAm), Arturo Guzmán Ábrego, encabezó la clausura del tiradero de basura en el municipio de Charo, ya que presentaba varias irregularidades de impacto ambiental, entre éstas, no contar con la autorización para el tratamiento de residuos de manejo especial.
Lo anterior, fue atestiguado por el presidente municipal de Charo, Raúl Prieto Gómez, quien recibió y firmó el acta en la que quedó constatada la clausura de dicho establecimiento, en el cual también se arrojaban los materiales sin previa separación en un barranco no autorizado, propiciando ser quemados al aire libre con las consecuencias de salud negativas para quienes ahí laboran y las comunidades cercanas, aunado a la ilegalidad del tiradero.
Cabe destacar que desde la administración municipal anterior, las autoridades locales habían sido notificadas sobre las correcciones que tenían que llevar a cabo para el manejo de este depósito de residuos, y al no cumplir con los lineamientos requeridos se procedió a la clausura.
Dentro de los requerimientos que se solicitaron para su regularización están un estudio de daño ambiental y tener en orden la autorización expedida por la Secretaría de Urbanismo y Medio Ambiente del estado (SUMA), para el tratamiento de residuos de manejo especial.
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